Cabalgatas entre los términos de Estellencs y Calvià, entre las fincas públicas de Son Fortuny y Galatzó

La Moleta Rasa y el Morralàs son dos hitos inequívocos de la finca pública de Son Fortuny. Una, la primera, porque se sitúa justo sobre la línea divisoria entre ambas posesiones, que coincide también con la partición de término. La otra, la segunda, porque es un conjunto de peñascos, la estribación norte de la serra dels Pinotells, cortados en vertical, desde los que se domina claramente el lado marítimo de esta parte de la Tramuntana, Patrimonio de la Humanidad.

Son Fortuny, hoy dividida, fue la posesión más grande de Estellencs y se extiende por la vertiente de tramuntana del puig de Galatzó (1.027 m). Ocupa la parte más elevada del término con un 40% de la superficie municipal, hecho que justificaba el dicho popular: “si cae, tapa”. En 1981, el Consell de Mallorca adquirió una franja de 283,5 ha —casi la mitad de toda la posesión— situada en la parte meridional y menos productiva de la finca, declarada de Utilidad Pública en 1983. El punto de inicio de la ruta lo situamos en el km 97 de la carretera de la Tramuntana (Ma-10). Podemos acceder a pie desde Estellencs, donde llega el transporte público, siguiendo el GR-221, lo que supondría añadir unas 3 horas más en total a la caminata.

La ruta

[00 min] Empezamos a caminar desde la carretera por la pista de tierra que sube a la Boal de les Serveres y a la coma d’en Vidal. Nuestros primeros pasos forman parte de un tramo del GR-221 (Ruta de Pedra en Sec), que no haremos entero porque nos desviaremos antes para buscar el pas del Cossi. Al principio, el camino es fácil, algo empinado al inicio, pero ancho y cómodo. La pista que recorremos es una obra de los años 70 que sustituyó un viejo camino de carro. Ahora atraviesa una ladera cubierta de pinos que en un pasado lejano debió estar formada por pequeñas rotes y ranchos de carbonero.

Tras un puñado de curvas, llegamos a una bifurcación importante [15 min], a los pies del Morralàs (660 m); hacia la derecha la pista continúa ascendiendo en dirección al refugio de la coma d’en Vidal y Capdellà. Nosotros tomaremos el camino de la izquierda, señalizado como boal de les Serveres y puig de Galatzó. Al inicio es un tramo tranquilo y llano, pero de golpe se empina para ganar un pequeño rellano donde encontramos un área recreativa sencilla, con mesas y bancos de madera [20 min]. Un espacio resguardado por un bello encinar, ideal para hacer una pausa de hidratación antes de continuar la caminata. El camino más ancho continúa hacia levante, en dirección a la font de Dalt y la boal, un antiguo corral de toros situado a escasos minutos del lugar donde estamos. También es el que se utiliza como vía de regreso del Galatzó, en el circuito que sube hasta la cima desde el pas de na Sabatera.

Salimos del área recreativa por el camino que, señalizado como pas del Cossi y puig de Galatzó, nace a nuestra derecha y se dirige hacia poniente. Se trata de un viejo camino de herradura que describe una serie de curvas para salvar un pronunciado desnivel hasta llegar al coll del Morro (480 m). Los peñascos del cingle Redó, a nuestra derecha, y del morro de les Serveres, a nuestra izquierda, dan un aire épico a nuestra sencilla subida. A la salida del paso [35 min], encontramos un indicador de madera que nos recuerda la dirección a seguir hacia el puig de Galatzó, a la izquierda. Aquí, giramos a la derecha (sur/suroeste), por un sendero, bien señalizado, que nace justo al lado del cartel, y que es llano, pero pronto asciende para buscar un nuevo collado [45 min], entre la Moleta Rasa, a la izquierda, y el Morralàs, a la derecha.

En este punto dejamos el camino principal, que continúa hacia la serra dels Pinotells y el comellar de les Sínies (sur/suroeste), y giramos bruscamente a la izquierda para seguir una hilera de hitos, muy claros, que nos han de guiar hacia levante hasta la cima de la Moleta Rasa. La subida la hacemos fuera de camino, caminando por la línea divisoria entre los términos de Estellencs y Calvià, que también marca la separación entre las fincas públicas de Son Fortuny y Galatzó. Es una ladera no muy empinada, rocosa y con poca vegetación.
[1 h 05 min] Alcanzamos la cima y disfrutamos de una panorámica de 360 grados que nos regala vistas del puig de Galatzó, de la Moleta de l’Esclop, y del resto de pugets, morros y morralassos que conforman la geografía de este entorno.

Hasta la cima del Morralàs

Deshacemos nuestros pasos hasta el camino principal [1 h 20 min] y continuamos nuestra marcha hacia llebeig (oeste). Iniciamos una breve y suave subida, señalizada con un buen hito, para luego continuar con otra bajada suave que nos lleva a una especie de collado [1 h 35 min]. Este punto es donde el camino se bifurca: a la izquierda hacia el comellar de les Sínies (finca pública de Galatzó) y a la derecha hacia la serra dels Pinotells (finca pública de Son Fortuny). Nosotros, ni una cosa ni la otra. Con brújula en mano, orientamos nuestros pasos hacia el norte. Encontraremos hitos dispersos, pero debemos trazar una diagonal ascendente en la ladera que tenemos delante, sin llegar del todo a la cresta, porque el Morralàs se encuentra, precisamente, en el extremo norte de esa pequeña sierra. Más o menos, hemos de alcanzar un punto de la cresta donde se hace bien visible el desnivel entre la serra dels Pinotells y la punta del Morralàs. Buscamos el punto más accesible para acercarnos y afrontar una sencilla trepada hasta la cima.

[2 h 05 min]. Sin ser difícil ni peligroso, hay que tomarse esta parte de la ruta con mucha precaución y sensatez (con “sensatez de bestia vieja”, como decía mi padre). Vale la pena hacer una buena parada y disfrutar plenamente de las inmensas panorámicas que nos regala el Morralàs. A nuestros pies, podemos ver la coma d’en Vidal y la pista que la comunica con la carretera.

El descenso lo haremos por el mismo camino. Al bajar del último puig, debemos orientarnos hacia migjorn (sur) para trazar una nueva diagonal descendente hasta el punto descrito anteriormente. Una vez recuperado el sendero principal, tomamos hacia nuestra izquierda en dirección al pas del Cossi, que nos ha de conducir a la boal de les Serveres y de allí a la pista de la coma d’en Vidal, hasta llegar a la carretera Ma-10
[3 h 15 min].